martes, 30 de mayo de 2017

De nuevo por aqui



Hace bastante tiempo, seguramente mucho, que no dejó unas líneas por aquí. Aunque ya sabemos que el concepto tiempo siempre es relativo y en lo referente a la comunicación pues  seguramente lo es más (según la predisposición del emisor y de la paciencia del receptor del discurso, texto, mensaje o post.) pero lo que es obvio es que no es muy recomendable, si uno quiere que se le lea, dejar pasar diecisiete meses entre post y post.

Con propósito de enmienda y dispuesto a sobreponerme a bajones y  vagancias varias,  que propician que el síndrome del folio en blanco pueda prolongarse no ya semestres si no incluso quinquenios, doy por inaugurada esta nueva etapa, corto la cinta,  y penetro de nuevo en mi portal,  cubil y refugio, donde al amparo de la luz de un viejo candil, intentaré acercaros de nuevo y principalmente las impresiones de mi vida rodante a lomos de mi incondicional y ya algo senil F55,  que aunque por su nombre, nuestro cerebro pueda situarla flanqueando la formación de un escuadrilla de los USA TOP GUN, cumple una función ciertamente más modesta pero mucho más vital.

Pero también me gustaría volver a   contaros viejas historias, algunas que todavía están impresas en la memoria de las calles de mi ciudad, otras guardan prudente silencio entre antiguas cabeceras de prensa y el resto, las más numerosas, seguro que todavía me siguen esperando, escondidas en las estanterías de cualquier biblioteca o entre los recuerdos y testimonios de mi gente.

Sea como sea…. De nuevo por aquí.

Quili